Blogia
Puño y letra

Primero las esquelas, ahora los cadáveres

Propuesta UEHace ya bastante tiempo, las cajetillas de tabaco se convirtieron en soporte de un mensaje en el que las autoridades sanitarias avisaban de que fumar perjudica seriamente la salud. Hace algo menos, esos mensajes crecieron en tamaño y también en dureza. Frases como “Fumar mata” o “Fumar acorta la vida” se convirtieron en testigos de la vida de muchos fumadores.


Aunque fueron inicialmente recibidos con protestas, el paso de los meses fue haciendo inofensivos los nuevos mensajes. La gente comenzó a llamarlos “esquelas”, por su apariencia y a devaluar su contenido haciendo chistes sobre ellos. Era una manera de defenderse de las amenazas que sugerían.


Ahora llega una nueva vuelta de tuerca. Hemos conocido reciéntemente que la Unión Europea ha seleccionado una serie de imágenes para incluirlas en las cajetillas de tabaco de los países miembros. Su objetivo, el mismo que el de los antiguos mensajes: mostrar los peligros del tabaco y disuadir a los fumadores. El comisario de Sanidad de la UE, David Byrne, tras presentar un informe sobre el consumo de tabaco en Europa, ha anunciado que cada país debe decidir si obliga a imprimir estas imágenes en las cajetillas.


David Byrne, el padre de la ideaEl problema es que, en esta ocasión, la idea de las “famosas” autoridades sanitarias es de muy mal gusto. Entre las 42 imágenes seleccionadas por la UE hay rostros de cadáveres cubiertos por sábanas blancas, pulmones afectados por el cáncer, operaciones a corazón abierto, enfermos agonizantes o primeros planos de las gargantas de personas que padecen tumores de laringe. Irlanda y Bélgica ya han anunciado que desde 2005 incluirán estas fotografías en las cajetillas.


Aunque la medida no es nueva, en esta ocasión nos puede tocar muy de cerca y es que el Ministerio de Sanidad ya la está estudiando. Como no fumador me opongo frontalmente. No sé que pensará usted, pero a mí me apetece bastante poco tener que ver la foto de un cadaver cada vez que a alguien le apetezca fumar a mi alrededor.


foto:zonalibre.orgSi a esta medida le sumamos la intención de la Comisión Europea de prohibir fumar en todos los lugares públicos incluyendo lugares de trabajo, bares y restaurantes; la sensación que uno acaba teniendo es que se ha abierto la caza del fumador. Si en su momento los leprosos fueron repudiados por la sociedad, parece que los fumadores son los leprosos del siglo XXI.


Eso sí, nadie se atreve a prohibir la venta de tabaco. Teniendo en cuenta todo lo que dicen las autoridades sanitarias, ¿por qué no lo ilegalizan?. La razón es muy sencilla: el estado ingresa vía impuestos especiales un importante porcentaje de cada euro que se gasta un fumador en cigarrillos. Una vez más, la Administración quiere estar al plato y a las tajadas. De hecho, no podemos olvidar que hasta hace no mucho, la venta y producción de tabaco era un negocio que el Estado gestionaba en régimen de monopolio.


En lugar de tanto mensaje de mal gusto, la sanidad pública podría gastarse parte de los ingresos que genera la venta de tabaco al estado, en planes efectivos para dejar de fumar: charlas, subvenciones a la compra de parches y chicles de nicotina, grupos de trabajo con psicólogos…etc…Nadie dice que el tabaco no sea malo. Eso ya es sabido. Pero las medidas a las que recurren las autoridades para reducir su consumo, son, como mínimo, inapropiadas.

1 comentario

En Pamplon@ -

Coincido. Ciertamente me parecen demasiado fuertes las fotitos esas, aunque sean algo real. Creo que es radicalizar muchos las cosas. ¿No hay horario infantil para impedir que se vean estas imágenes? ;-) Es educar a lo salvaje.
Sigan con el blog, lo hacen muy bien.
Hemos decidido enlazarles.